Colegio Virgen Blanca, CEPA Faustina Álvarez García, Centro Don Bosco, IESO de la Pola de Gordón, CEIP Valentín García Yebra Ponferrada y CEIP Villa Romana Villaquilambre son los centros distinguidos.
La Consejería de Fomento y Medio Ambiente ha resuelto la concesión del sello ambiental ‘Centro Educativo Sostenible’ a 20 centros (6 de ellos en la provincia de León) por sus iniciativas de ambientalización integral, basadas en la educación y la gestión ambiental. Este sello ambiental es una iniciativa conjunta de las consejerías de Fomento y Medio Ambiente y de Educación creado en 2018, cuya resolución para el curso 2019-2020 se publica en el Boletín Oficial de Castilla y León este viernes, 5 de junio, Día Mundial del Medio Ambiente.
La distribución por provincias de los 20 centros docentes no universitarios a los que se les concede el sello ambiental en el curso académico 2019-2020 es la siguiente: 1 centro de Ávila (IES Vasco de la Zarza), 1 de Burgos (Colegio La Salle), 6 de León (Colegio Virgen Blanca, CEPA Faustina Álvarez García, Centro Don Bosco, IESO de la Pola de Gordón La Pola de Gordón y CEIP Valentín García Yebra Ponferrada, CEIP Villa Romana Villaquilambre), 1 de Palencia (Colegio San Gregorio Aguilar de Campoo), 3 de Salamanca (CPrEE Los Tilos, CPrlFP Casa Escuela Santiago Uno y CPrlFP Lorenzo Milani Cabrerizos), 1 de Segovia (CEIP La Pradera Valsaín), 1 de Soria (CEE Santa Isabel Soria), 5 de Valladolid (CEIP Miguel Delibes, CPrFP Menesiano San Pedro Regalado, Colegio Ave María, Colegio Sagrado Corazón y CEIP Virgen de Sacedón Pedrajas de San Esteban) y 1 de Zamora (CEIP CRA de Gema Gema).
El sello ambiental responde a la II Estrategia de Educación Ambiental de Castilla y León 2016-2020 y da cumplimiento a la Agenda 2030 aprobada por la Organización de las Naciones Unidas en 2015. La entrega de los reconocimientos se ha aplazado para cuando se retome la actividad académica. También se aplazan las actividades que anualmente se programan con los centros que obtienen este reconocimiento, que en el curso pasado incluyó la visita a un espacio natural de la Comunidad, así como la dotación de material educativo y de gestión ambiental para el centro o la realización de una actividad de educación ambiental en el propio entorno del centro.
La convocatoria para el curso 2019-2020 se realizó mediante Orden FYM/991/2019, de 16 de octubre, que abrió un plazo de presentación de solicitudes entre el 15 de enero y el 17 de febrero de 2020, periodo en el que se presentaron 31 solicitudes.
Para ayudar en la preparación de las candidaturas, las consejerías de Fomento y Medio Ambiente y de Educación han colaborado para impartir 4 cursos de formación para docentes a través de los Centros de Formación e Innovación Educativa de las provincias de León, Palencia, Valladolid y Zamora. Estos cursos se han centrado especialmente en las oportunidades para reducir los impactos ambientales de los centros, ya que uno de los requisitos del sello es disponer de un programa de gestión ambiental. Este programa de gestión ambiental debe buscar mejoras reales y concretas en la recogida de los residuos que se generan, en el consumo de energía, en el gasto de agua, en el control de los ruidos, etc.
Se trata de la segunda concesión de este distintivo, ya que el año pasado se reconoció a 24 centros, por lo que son ya 44 los que cuentan con el sello ambiental en la Comunidad Autónoma.
De esta manera, hay ya 30 localidades que cuentan con algún centro educativo acreditado con el sello ambiental: Ávila, Arenas de San Pedro, Burgos, Lerma, León, La Bañeza, La Pola de Gordón, Ponferrada, San Andrés del Rabanedo, Santa María del Páramo, Villaquilambre, Palencia, Aguilar de Campoo, Guardo, Salamanca, Cabrerizos, Segovia, Santa María la Real de Nieva, Valsaín, Soria, Valladolid, Mojados, Pedrajas de San Esteban, Zamora, Benavente, Fermoselle, Gema, Morales del Vino y Toro.
Según la orden que lo regula, la ciencia, la gestión y la tecnología desempeñan una función esencial en la protección del entorno en el que vivimos, pero el avance hacia un desarrollo sostenible demanda, además, cambios sociales y culturales, donde la educación tiene una influencia decisiva.